¿Has pensado que también podrías ser abortado?
El valor de la vida agotado y sin reservas
necesita resurgir de la muerte, y el terror solo así recobrará el respeto que
por él se tenía, porque por desgracia tenemos solo un tiempo y espacio en esta
tierra para hacer, para actuar y para dar a los demás dentro de nuestra vida.
Solamente en países como el nuestro la ignorancia y la perversidad se unen el
egoísmo con la mediocridad a procrear la irresponsabilidad de cometer un pecado
tan atroz como es el aborto.
A veces creemos que el hoy será un futuro
estable, donde no pasará nada, donde basta rezar un poco y portarse bien para
que a nosotros no nos toque ser abortados de esta tierra...cuando nuestros hermanos silenciados por
sus madres y padres mueren en el primer sagrario de amor. Pienso que este país está
en decadencia en todos los sentidos, lo veo cada mañana al despertarme cuando
en medio del tráfico y los egoísmos de muchas e incontables personas llego a
trabajar, cuando cada comentario expresado en la televisión o en la radio
son solo aplicables a determinadas ideologías que no solo contradicen la
verdad sino que la negocian, cuando veo millones acudiendo de voluntarios y
cooperando con la visita del Santo Padre Francisco pero pocos asistiendo a
marchas o lo que es aún peor a un centro de abortos a rezar...y te pregunto a
ti y a mí: ¿has pensado en que podrías ser abortado?, porque sin duda ver
al Papa es importante pero también es importante acudir donde nuestro hermano
muere, incluso es un mandato del mismo Santo Padre y una razón más de su
visita, pues viene a ver la única ventana al Cielo, nuestra Madre la Virgen de
Guadalupe...la cual para que acabemos de entender está embarazada de nuestro
Dios y de seguro es la que más sufre por sus hijos, de este pueblo donde se
quiso quedar después de sus apariciones a San Juan Diego en 1531; es por eso
que si en verdad queremos detener esta decadencia es importante que esos miles
que irán a ver al Papa sean congruentes y vayan a un centro de abortos a rezar
al margen de los 40 Días Por La Vida, campaña loable, costosa, laboriosa, y
cansada tanto física como espiritualmente pero que traerá beneficios a la
nación y aún más un pago en el Cielo, por Dios pues se hizo ante los ojos de
Nuestra Madre Del Cielo pues es en su casa que se mata tantos niños y que de no
hacerlo debería considerarse la opción de ser abortado de la eternidad, pues
sin duda esta es una omisión que debe pagarse en el purgatorio y en caso de
aquellos que se dicen católicos pero son pro-aborto y no se arrepientan
de tal incongruencia la opción de pagar este mal en el infierno.
Sin duda todos podemos ser abortados, no
por el hecho de estar vivos ganamos ya la vida eterna por el contrario estamos
más alejados de esos bebes abortados de merecerlo porque a diferencia de ellos
no somos mártires y nuestro méritos no están en haber sido sacrificados, sino
en los actos de cada día que hacemos en pro del prójimo; por eso les reitero a
todos aquellos que sólo ven y no actúan que recen por el fin del aborto, pero
que si van a ir al Papa no pueden dejar de ir a rezar afuera de un centro de
abortos o lo que es aún mejor comprometerse con esta vigilia.
Y término mi pregunta: ¿has pensado que
podrías ser abortado? con la siguiente pregunta: ¿Si tuvieras la posibilidad de
acompañar a Cristo en Su Pasión en pleno 2016, lo harías o serías de los que se
quedan alejados por temor?
Este artículo es una opinión personal,
cuestión que no hace referencia ni responsable a 40 Days For Life, ni a ninguna
campaña local solo hace responsable a quien la emite.
Directora de 48 Días Provida.
Comentarios
Publicar un comentario